Calculando la exposición correcta

Como ya vimos anteriormente, cada uno de los ingredientes del la exposición (apertura, velocidad de obturación y ISO) se tienen que equilibrar para crear una exposición correcta.


Ahora que sabes lo que son y cómo éstos determinan la exposición, es posible que aún te estés preguntando por dónde empezar. ¿Cómo y dónde he de poner cada uno de los ajustes para obtener una imagen correctamente expuesta?

La respuesta es que no hay una sola manera de crear una fotografía. El ajuste de una exposición adecuada se encuentra en el equilibrio de cada uno de los ingredientes para obtener el resultado que desees en tus fotografías. Por ejemplo, si decides utilizar poca profundidad de campo, podrías aumentar la velocidad... o si, por el contrario, quieres que la fotografía esten todos los elementos en foco, podrías aumentar el ISO... siempre dependerá de tu criterio.

Pero éstos son solo dos ejemplos de lo que podríamos hacer. Cualquier ajuste de configuración es intercambiable con otras configuraciones para obtener el mismo resultado en la exposición, esto se conoce como reciprocidad exposiciones.

Es decir, las imágenes tendrán un aspecto diferente con respecto a los niveles de la profundidad de campo, el movimiento y el ruido, pero la cantidad de luz que llegará al sensor será la misma. Tú podrías haber pensado, en el segundo ejemplo, que si querías todos los elementos enfocados, en vez de subir el ISO, podrías haber decidido disminuir la velocidad de obturación. También hubiera sido correcto. Esto significa que si la cámara está configurada de una manera, y se cambia uno de los ajustes, pero queremos mantener la misma cantidad de luz que alcance al sensor, simplemente hemos de adaptar los otros dos ajustes, ya sea la apertura, velocidad de obturación, o el ISO, para equilibrar la exposición. Es tu tarea ajustar estos valores para lograr el aspecto creativo que tu quieras darle a tus fotografías.

1. Foto sobreexpuesta.   2. Foto expuesta correctamente.   3. Foto subexpuesta
Ahora ya sabes cómo trabaja la cámara, es tu trabajo como fotógrafo recuperar ese control y elegir tu propia configuración. Hay diferentes maneras de hacer esto, y más obvia es usar el ajuste manual de tu cámara. Fotografiar en modo manual (M) te permite un control total de los ajustes sin dejar que la cámara elija por ti cualquier otra cosa.

El dominio de los ajustes de la exposición es el primer paso para entender la fotografía. Si has entendido estos ingredientes básicos, el resto es fácil... es sólo cuestión de experimentar, jugar con tu cámara, y descubrir tus preferencias y estilo.

¿Cómo puedo saber si estoy exponiendo correctamente?


Y dada una apertura ¿Qué velocidad debo usar?

Si miramos por el visor de la cámara veremos una guía que nos indica si la fotografía está correctamente equilibrada. Este medidor nos muestra por medio de una marca o flecha si la escala de medición está centrada. Si la marca se sitúa en el "0" la fotografía tendrá una correcta exposición.


También podemos ajustar los parámetros de la exposición de modo que al mover la marca a la izquierda estamos subexponiendo (entrará menos luz en el sensor y la fotografía será más oscura) o si la movemos hacia la derecha estamos sobreexponiendo (alcanzará más luz al sensor).

En la cámara existen otros dos modos de disparo, prioridad de apertura (A o Av) y la prioridad de obturación (S o Tv), que te permiten seleccionar el ISO y uno de estos ajustes, y la cámara determina la configuración del otro por ti. Por ejemplo, si disparas en modo prioridad de apertura, la cámara decidirá por ti cual es la velocidad de obturación adecuada para una correcta exposición. Igualmente, en estos dos modos todavía puedes mantener el control sobre la exposición mediante el ajuste de la compensación de exposición, del cual hablaremos más adelante, y que te permite engañar al medidor sobreexponiendo o subexponiendo la imagen.


También existe el modo Auto, dónde la cámara  tendrá el control completo y no te dejará tomar decisiones sobre cualquiera de sus configuraciones. Desde YA te desaconsejo el uso de este modo si quieres dejar volar tu imaginación y creatividad!

Por otro lado, existe el modo programa (P) dónde la cámara ajusta tanto la velocidad de obturación como la apertura del diafragma y tu seleccionas el ISO. Podríamos decir que se trata de un semi-automático, ya que con este modo también podemos variar si nos interesa la velocidad y apertura, o compensar la exposición. Es un modo de disparo que puede ser interesante, para otro tipo de fotografía que no sea la gastronómica, y nos puede sacar de más de un apuro cuando no dispones de tiempo para disparar en manual.

Ahora podrías hacer una prueba... haz una foto, sin flash, a una pared blanca. Verás que que el resultado no es exactamente blanco sino tirando a gris. Si pruebas con una pared negra te pasará exactamente lo mismo. En esos casos deberás compensar la exposición. Por ejemplo, en el caso de la pared blanca, si queremos que salga más "blanca" podríamos aplicar una compensación de un paso (+1).

Sea cual sea el método que uses, depende completamente de ti el método que mejor se adapte a su estilo de fotografía.

No hay comentarios