La finalidad en una fotografía gastronómica es centrar el interés y la mirada en nuestro plato... todo lo demás debería pasar a un segundo plano. Pero, para hacer nuestras fotografías nos tenemos que contentar con ese pequeño espacio, junto a una ventana... y muchas veces no podemos elegir el fondo que más nos gustaría... ¡aquí es cuando entra el juego la profundidad de campo!
La profundidad de campo (DOF, Depth of Field en inglés) es la distancia por delante y por detrás del objeto fotografiado que se ve nítida, y nos permite aislar el centro de interés de la fotografía de otros elementos que nos puedan molestar en la composición.
Cuando hablamos aquí sobre la apertura, vimos en qué se basaba la profundidad de campo y que ésta dependía de varios factores. Precisamente el ajuste de la cámara que nos permite jugar con la profundidad de campo es la apertura del diafragma.
Pero, ¿Sabes de qué manera puedes aliarte con la profundidad de campo, o incluso utilizarla como elemento compositivo?
Por ejemplo, cuando quieras fotografíar paisajes o grandes espacios en los que quieres que todo se vea nítido, usa aperturas cerradas (recuerda, números F grandes, como por ejemplo f/18), así conseguirás aumentar la profundidad de campo en tus composiciones.
Por otro lado, en fotografía gastronómica o de retrato se suele utilizar aperturas de diafragma abiertas (números F pequeños, como por ejemplo f/1.4), obteniendo así una profundidad de campo reducida.
Ese tipo de fotografía debe centrar el protagonismo en el sujeto fotografiado y nada más, el fondo debe quedar borroso. A esta técnica también se le conoce como enfoque selectivo.
¿Cómo conseguir un fondo desenfocado con mi cámara réflex?
Cómo ya sabemos, el quid de la cuestión se encuentra principalmente en la apertura del diafragma. Has de trabajar en modo manual (M) o modo de prioridad de apertura (denotado como Av o A, según la cámara) para controlar el diafragma. Y sigue estos consejos:
- Abre el diafragma todo lo que puedas. Si trabajas en manual, compensa la exposición con una velocidad menor, o aumenta la sensibilidad.
- Aumenta la distancia focal, utiliza el zoom al máximo. Si tienes focales fijas, el efecto se verá más con un objetivo de 100mm que con un 50mm.
- Acércate lo máximo que puedas al objeto a fotografiar.
- Situa al objeto lo más alejado que puedas del fondo.
Esta es la manera de minimizar la profundidad de campo.
¿Y con una cámara compacta?
Con las cámaras compactas, que no poseen en la ruedecita el modo manual (M), no es imposible conseguir el efecto del fondo desenfocado.
Aunque no es una tarea fácil, porque suelen ser bastante automáticas y no tienen grandes aperturas... solo necesitaremos un poco de práctica y esta sencilla receta:
- Selecciona el modo retrato de tu cámara, para asegurarnos que usará toda la apertura.
- A continuación selecciona el modo macro, si tu cámara dispone de él, ya que esto nos permitirá acercarnos lo máximo posible nuestro objeto.
- Utiliza el zoom óptico al máximo, para disponer de la mayor distancia focal que tenga tu cámara. Alerta! He dicho el zoom óptico, con el digital no harás nada. Te recomiendo que leas el manual de tu cámara para saber cual es tu zoom óptico al máximo y como desactivar el digital.
- Por último, deberás situarte lo más cerca posible del objeto a fotografiar y seleccionar un fondo que te quede lo más alejado posible.
El retrato que le he hecho de mi amigo Totoro, más arriba, está hecho con una compacta y mediante la receta que acabamos de ver.
El Bokeh
Cómo me gusta esa palabra... se pronuncia "boqué" y significa desenfoque. Este concepto se basa en cómo un objetivo produce tal desenfoque y no tanto de la cantidad.
Los objetivos para retratos y los muy luminosos (recuerda, aperturas grandes como f/1.4) producen un bokeh agradable.
Uno de los resultados de un interesante bokeh, es cuando conseguimos esos “círculos” que se forman detrás del objeto enfocado y que se suelen producir en las áreas más desenfocadas y en fuentes de luz potentes.
¿Cómo hago para conseguir un bokeh agradable?
- Utiliza aperturas grandes: por ejemplo f/1.4, a aperturas más pequeñas (mayor número F), más pequeño será el tamaño del bokeh.
- Distancias focales largas: cuanto mayor sea la longitud focal, más grande será el bokeh.
- Brillos y luces pequeñas: no es indispensable, pero en base a esto se producirá el efecto con mas intensidad, por ejemplo unas luces de navidad, de una ciudad, de los coches, los rayos de sol atravesando los árboles... podrían crear un buen bokeh.
¿Has experimentado alguna vez con la profundidad de campo? ¿Has creado imágenes con un espectacular bokeh? ¿Te atreves a compartirlas?
Aiiii! como me gusta el efecto bokeh (aunque hasta ahora no sabía ponerle nombre). Estas navidades intenté hacer varias pruebas sin éxito, pero ahora que nos has hablado de él, lo volveré a probar!! :)
ResponderEliminarGracias guapa! como siempre, nos enseñas cosas nuevas y super interesantes! ;)
Muua!